No todos los días estamos igual. El clima, el lugar donde vivimos, las personas con las que nos comunicamos, las situaciones que vivimos o que nos hacen vivir, nuestra alimentación... Todo influye, aunque no lo parezca. Por esto, os presentamos una serie de ideas que os ayudarán reducir estos días -lo sentimos, pero los hay que sufrir, no se pueden evitar-, o por lo menos a hacerlos más llevaderos.
ALIMENTACIÓN E HIDRATACIÓN
Es necesario que nuestra alimentación sea completa -hidratos de carbono, proteínas vegetales y animales, lípidos, vitaminas, minerales- para que los neurotransmisores que se encargan de nuestros pensamientos y emociones funcionen correctamente.
Por supuesto, una correcta hidratación -entre 1.5 y 2 litros diarios de agua- también son necesarios para evitar la fatiga crónica.
EJERCICIO
La liberación de energía ayuda a contrarrestar esos días tristones. Con el ejercicio conseguimos la liberación de unas moléculas denominadas endorfinas, que también reciben el nombre de "hormonas de la felicidad"; es por esto que con actividades tan simples como un paseo, un baile o incluso la meditación, podemos mejorar nuestro estado de ánimo.
DESCANSO
Una correcta regulación del sueño puede ser clave. El reloj biológico -o ritmo circadiano- se guía por las horas de luz y oscuridad, por lo que para tener un descanso correcto, lo más recomendable sería acostarse temprano y levantarse temprano, sirviéndonos del refrán "a quien madruga, Dios ayuda".
MANTENERSE OCUPADOS
Ya sea en el propio trabajo, con pasatiempos o talleres creativos: la cuestión es tener la mente ocupada. Del mismo modo, esto puede ayudarnos a sentirnos valorados positivamente, porque se nos da bien, porque nos gusta, porque la gente nos apoya...
Estas son cuatro ideas que nos pueden ayudar a sobrellevar esos días; si tienes más dudas, o piensas que esto no es suficiente, recuerda que siempre es correcto acudir a un especialista. No lo dudes.
Es necesario que nuestra alimentación sea completa -hidratos de carbono, proteínas vegetales y animales, lípidos, vitaminas, minerales- para que los neurotransmisores que se encargan de nuestros pensamientos y emociones funcionen correctamente.
Por supuesto, una correcta hidratación -entre 1.5 y 2 litros diarios de agua- también son necesarios para evitar la fatiga crónica.
EJERCICIO
La liberación de energía ayuda a contrarrestar esos días tristones. Con el ejercicio conseguimos la liberación de unas moléculas denominadas endorfinas, que también reciben el nombre de "hormonas de la felicidad"; es por esto que con actividades tan simples como un paseo, un baile o incluso la meditación, podemos mejorar nuestro estado de ánimo.
DESCANSO
Una correcta regulación del sueño puede ser clave. El reloj biológico -o ritmo circadiano- se guía por las horas de luz y oscuridad, por lo que para tener un descanso correcto, lo más recomendable sería acostarse temprano y levantarse temprano, sirviéndonos del refrán "a quien madruga, Dios ayuda".
MANTENERSE OCUPADOS
Ya sea en el propio trabajo, con pasatiempos o talleres creativos: la cuestión es tener la mente ocupada. Del mismo modo, esto puede ayudarnos a sentirnos valorados positivamente, porque se nos da bien, porque nos gusta, porque la gente nos apoya...
Estas son cuatro ideas que nos pueden ayudar a sobrellevar esos días; si tienes más dudas, o piensas que esto no es suficiente, recuerda que siempre es correcto acudir a un especialista. No lo dudes.
buen articulo el humano debe buscar siempre el buen vivir no conformarse con lo que tiene, con depresiones, triztezas solo debe conformarse con la felicidad
ResponderEliminar