Consejos para el buen vivir: beneficios de los masajes

Muchas veces, cuando hablamos de masajes, pensamos en esas típicas fotos de gente guapa con una cara de felicidad... Tal vez, si vamos nosotros -seamos guapos o "menos guapos", ya que entre nuestros hipocondríacos no hay ningún feo :)- no salgamos con la misma cara de felicidad, pero sí mucho mejor física y mentalmente.

La función de los masajes no solo es la de relajarnos, sino que tienen muchas más. Por eso, para que veáis de qué sirven, os dejamos una serie de beneficios de los masajes que os harán replantearos si ir o no a recibir uno. 

RELAJAR

Este es el beneficio más conocido, ya que al recibir un masaje, los músculos se destensan, ofreciendo una sensación de descanso total. Generalmente, su capacidad para relajar es  la que ayuda a conseguir los otros beneficios -como veremos posteriormente-.

DOLOR

El famoso dolor de espalda puede verse muy aliviado gracias a los masajes. Con ellos, podemos conseguir mayor flexibilidad en las articulaciones, lo que conlleva a una meno rigidez de espalda. De la misma forma, y al relajar, ayuda a reducir el dolor cuando este es crónico.

ESTRÉS, ANSIEDAD Y DEPRESIÓN

Cuando una persona con una de las características anteriores recibe un masaje, se consigue el descenso de una hormona denominada cortisol, la cual es liberada en caso de estrés. Ante su descenso, lo que se consigue es una mejoría en el humor y el ánimo.

Junto con esto, la aplicación de masajes puede aumentar la producción de ciertos neurotransmisores como la serotonina o la dopamina, muy relacionados con el estado de ánimo.

BELLEZA

Además de que los músculos se relajan, los masajes -especialmente los de la zona facial, que es la parte que más se ve- hacen aumentar su brillo y tersura, ya que mejoran la circulación y ayudan a eliminar las células muertas. También presentan efectos positivos sobre el cuero cabelludo y sobre el pelo.